miércoles, 12 de agosto de 2009

¿Trabajar con 8 bits ó 16 bits?

Digitalmente podemos trabajar con 8 bits o con 16 bits. La diferencia está en la cantidad de información que guarda cada archivo. Las imágenes de 8 bits tienen 256 niveles de luminosidad por cada color (RGB), mientras que las de 16 bits tienen 65536 niveles de luminosidad por cada canal (RGB). Esta cantidad de información determina entonces la cantidad de retoques que se podrán hacer sobre la fotografía sin deteriorarla.

Sin embargo, usar 16 bits también tiene sus inconvenientes;
- Las fotografías pesan más, ocupan mayor tamaño en disco.
- El formato JPEG no lo soporta, el máximo es 8 bits.

El ejemplo más claro para ver como los retoques afectan a una fotografía de 8 bits y a una de 16 bits, es observando el histograma. El siguiente ejemplo muestra el histograma de la misma fotografía tratada en 8 bits y en 16 bits respectivamente.



Podemos observar que las imágenes y los histogramas son idénticos. Las fotografías sin retoque casi no tienen diferencias. Ahora vamos a mover los claros en el histograma para obtener una mejora en la imagen.


16 bits

Hemos retocado el histograma de la foto de 16 bits equilibrándolo. La mejora es considerable y no se aprecia pérdida de información, hay continuidad en la transición entre niveles.


8 bits

Por el contrario, al realizar la misma operación en la fotografía de 8 bits, podemos apreciar el llamado "efecto peine" en el histograma. Ésto se debe a la pérdida de información, en concreto a valores de luminosidad que han dejado de existir, y que como consecuencia puede dar lugar a degradados poco suaves.

Si imprimiésemos ambas fotografias a un tamaño ampliado, veríamos claramente las diferencias entre ambas.

sábado, 8 de agosto de 2009

Fundación Foto Colectania

FUNDACIÓN DE FOTOGRAFÍA

La Fundación Foto Colectania es una entidad privada sin ánimo de lucro, que se inauguró en Barcelona en el año 2002 y cuya finalidad es difundir la fotografía y el coleccionismo a través de exposiciones y actividades (coloquios, seminarios, viajes) y la edición de catálogos.

Foto Colectania cuenta además con una colección de fotografía que reúne más de 2.000 obras de autores españoles y portugueses desde 1950 hasta la actualidad. Además, dispone de una biblioteca de consulta libre y de una cámara de conservación donde se guarda el fondo fotográfico, el archivo de Paco Gómez (donado por su familia en 2001) y el depósito de una parte de la colección de Juan Redón.

La fundación se financia en gran parte gracias a la ayuda de los patrocinadores, amigos y socios de la fundación y colaboraciones externas.

(Texto extraido de la presentción de la Fundación en su página web).

martes, 4 de agosto de 2009

Fotógrafo - Miroslav Tichy



Miroslav Tichy

Nacido en Kyjov, antigua República Checa, en 1926, cursó estudios de bellas artes en Praga para dedicarse a la pintura. Perseguido por el régimen comunista se vió obligado a abandonar la pintura tras ser ingresado en psiquiátricos y cárceles. Expuso por última vez sus cuadros en la década de los cincuenta. En los setenta iniciaría su andadura fotográfica.

Tichy es una persona asocial, ermitaña y excéntrica, que vive sola desde hace décadas en su pueblo natal. Allí retrata a las mujeres de su pueblo con sus propias cámaras. Propias porque Miroslav fabrica sus cámaras con desechos de la basura. Una lata de tomate usada, un trozo de plexiglás abandonado o un paquete de cigarrillos vacío pueden ser parte del material con que están fabricadas sus cámaras. Según dice él, "si quieres ser famoso, tienes que hacer lo que sea que hagas peor que todos los demás en el mundo".

En sus momentos más productivos hace unas cien fotos al día, que revela el mismo y de las que solo saca un positivo por negativo. Su especialidad las mujeres de su pueblo en cualquier situación cotidiana. Sus fotos expresan la forma de ver las cosas desde el punto de vista de un solitario automarginado, enfatizado por el echo de que han sido tomadas por cámaras realizadas manualmente con desperdicios.

Gracias a la labor de Roman Buxbaum, conocido de Tichy, el excéntrico y solitario fotógrafo expone sus trabajos por todo el mundo y sus fotos alcanzan valores entre los 4000 y 8000 euros cada una. Cosa a la que Miroslav no da valor ninguno.

Algunos de sus trabajos:



domingo, 2 de agosto de 2009

Medir la luz

Desde siempre, la gente que ha tomado fotografías ha necesitado medir la luz para obtener una correcta exposición. Una fotografía debe tener un equilibrio entre la apertura de diafragma y el tiempo de exposición para limitar la luminosidad que alcanza la película o sensor.

Algunos fotógrafos de gran talento y experiencia lo hacen a ojo, la gran mayoría usamos un fotómetro, ya sea el interno de la cámara o uno externo.

Un fotómetro es cualquier instrumento capaz de medir la intensidad de luz. Gracias a su medición, sabremos cual es la exposición correcta para una determinada escena. El fotómetro interno de una cámara es muy útil, pero no es el más preciso, ya que realiza la medición a través del objetivo de la cámara y desde la distancia en que estemos colocados. Uno externo por el contrario, mide directamente desde unos sensores y lo hace en el lugar exacto donde está el sujeto u objeto a fotografiar.



Existen diferentes tipos de medición, dependiendo de la situación. Las cámaras reflex poseen todos o casi todos estos modos y una gran mayoría de las compactas de alta gama también incorporan dichos sitemas.

- Medición matricial; es el indicado para un uso general, ya que la escena se divide por zonas y se mide la luz por separado. El resultado final para la exposición, es el cálculo relativo a todas las zonas como conjunto.
- Medición central; mide en la zona central de la escena despreciando el resto.
- Medición puntual; el círculo de medición es mucho más pequeño que en el caso de la central, permitiendo tomar mediciones con precisión de determinadas partes de la escena. Muy útil cuando hay mucho contraste.

Los fotómetros también comenten errores, sobretodo en situaciones extremas, por lo que en determinadas condiciones, será necesario compensar la exposición (EV), si queremos obtener un resultado correcto. El rango típico de compensación es de +/- 3 EV, pudiendo seleccionarse valores en incrementos de 1/2 o 1/3 de punto de diafragma dependiendo de la cámara.

Las siguientes situaciones son propensas al compensado de la exposición EV:

- Escena con motivo oscuro sobre fondo claro; Los sujetos se oscurecen más de la cuenta, siendo la solución una sobreexposición +EV.
-Escena con motivo claro sobre fondo claro; Intentando alcanzar el gris medio, toda la escena tiende a oscurecerse. De nuevo con una sobreexposición, +EV, solucionamos el problema.
- Escena con motivo oscuro sobre fondo oscuro. Toda la escena tiende a aclararse, por lo que en este caso la solución es una subexposición -EV.